Trabajamos como comisión de carteles de la NEL. Y de la mano de dicho trabajo, hemos conformado un cartel para alojar en él lo que nos inquieta a cada una –Ángela, Clara, Julieta, Ana y Claudia- sobre el más-uno. Intentamos hacer surgir de cada inquietud, una pregunta. Y así poner a prueba la pregunta de cada una, tal como se concibe en el discurso analítico, como agujero en el saber.
Que el no saber sobre el tema propuesto, pase de ser la pasión neurótica del no saber o del saber acumulado, a la producción de un saber, en tanto algo sea dicho de una manera diferente. Es la apuesta del cartel.
Mas-uno es un concepto, y como tal, susceptible de ser construido como un universal. Más-uno es una práctica, y como tal, expuesta a lo singular de las contingencias. Más-uno es una función que se pone o no en operación, en cada encuentro del cartel.
Así, dejarnos enseñar por los carteles mismos, es lo que esperamos sostener como orientación, y, de esta manera, poder interrogar la función del más-uno en ellos, con sus impasses y sus modos de anudamiento logrados.
Veremos entonces, al final de esta experiencia de cartel, qué queda como resto, qué recogemos cómo producto. Les contaremos, es nuestro compromiso con la Escuela.
Ángela Fischer: ¿El más-uno del cartel puede tener una función de anudamiento como la del sinthome ?
Clara Holguín: ¿Qué tipo de "uno" implica el más-uno?
Julieta Ravard: El más-uno y los impasses de lo imaginario
Ana Ricaurte: ¿Cómo se orienta el más-uno frente a la presencia de lo real en el cartel? Una lectura de las dificultades en los carteles contemporáneos teniendo en cuenta la lógica del desorden de lo real del siglo XXI con sus incidencias clínicas y en la vida en general, como imposición de la fragmentación sobre los discursos, sobre las imágenes, sobre los vínculos.
Claudia Velásquez (más-uno) ¿En qué consiste la función del más-uno en lo que hace a la relación cartel-Escuela?